jueves, 16 de enero de 2020

LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XIX: EL ROMANTICISMO


1.   
    LA REVOLUCIÓN ROMÁNTICA: CONCIENCIA HISTÓRICA Y NUEVO SENTIDO DE LA CIENCIA.

El Romanticismo es un movimiento artístico  y literario que surgió a finales del siglo XVIII en Inglaterra y en Alemania que, durante la primera mitad del siglo XIX, se extendió por otros países de Europa (Francia, España, Italia, Rusia…) y América.
Este movimiento coincidió con una serie de cambios. Nos centraremos en los cambios históricos y científicos.

1.1. CAMBIOS HISTÓRICOS. LA CONCIENCIA HISTÓRICA:
En cuanto a los cambios históricos, la evolución del Romanticismo está relacionada con diversos procesos históricos que conforman la conciencia histórica:

·         La Revolución francesa (1789), el gobierno de Napoleón (1799-1815) y las guerras entre diversas coaliciones antifrancesas y las tropas napoleónicas en toda Europa.
·         La Restauración (formada por Prusia, Rusia y Austria), que tras la derrota de Napoleón en Waterloo (1815), promovió en los países europeos el retorno a las monarquías absolutas.
·         Las oleadas revolucionarias de 1820, 1830 y 1848, que consagraron el ascenso de la burguesía al poder político.
·         El inicio de la Revolución Industrial, que supuso el triunfo del capitalismo y que consolidó la preeminencia económica de la burguesía.


§  1.2.  CAMBIOS CIENTÍFICOS. NUEVO SENTIDO DE LA CIENCIA:
Otro importante cambio en el Romanticismo es el nuevo sentido de la ciencia, pues se produce un gran desarrollo de la ésta, con importantes avances científicos y técnicos que transforman el método tradicional de vivir. Tenemos importantes avances como:
·         La invención de la máquina de vapor por Watt y su aplicación revolucionaria a la industria.
·         La vacunación gracias a Pasteur, inaugurándose la era de las vacunas.
·         Corrientes científicas como la Teoría de la evolución de las especies de Darwin o las leyes de la herencia de Mendel.
·         Los experimentos de Erasmus Darwin (el abuelo de Charles Darwin anticipó las teorías sobre el origen de los seres vivos), Andrew Crosse (contemporáneo de Mary Shelley, solía experimentar con cadáveres y electricidad.), Andrew Ure (químico escocés que en 1818, el mismo año de la publicación de Frankestein, intentó resucitar a un muerto con descargas eléctricas.), etc.




2.    LA REVOLUCIÓN ROMÁNTICA EN LA LITERATURA

Antes de adentrarnos en la poesía romántica y en la novela histórica, nos centraremos en las características de la literatura romántica.
La literatura romántica tiene las siguientes características en cuanto al contenido:
-       Responde a una época, la primera mitad del XIX, en la que triunfó el sentimiento, a diferencia del siglo XVIII, en que predominaba la razón.
-       Ese triunfo del sentimentalismo llevó a la afirmación y exaltación del yo, que condujo al individualismo, al ansia de libertad y a la angustia, tristeza, insatisfacción, desengaño
-       La insatisfacción provocó el deseo de evasión: en el tiempo (interés por épocas remotas y legendarias), y en el espacio (hacia países lejanos y exóticos).
-       También resultaba especialmente interesante la búsqueda del misterio, de lo absoluto, lo nocturno, lo sepulcral, las ruinas…
-       El triunfo del sentimiento también condujo a la expresión exaltada del sentimiento amoroso.
-       Paradójicamente, aumentó el aprecio por lo local y nacional, que se manifestaba en el nacimiento de la novela histórica y en el auge de las leyendas sobre asuntos locales y regionales..
-       Se creó la figura del héroe rebelde, que no se sometía al orden establecido, sino que actuaba al margen de los valores predominantes.
-       Se daba una mayor conciencia social y política, sobre todo en los románticos liberales (Byron, Hugo..), en su afán por luchar contra lo establecido, contra el poder y la opresión.
-       Se desarrolló una nueva sensibilidad para mirar el paisaje y la naturaleza, que se acomodaba, con frecuencia a los vaivenes del espíritu, o cambios de ánimo, del escritor o de sus personajes

En cuanto a la forma, la literatura romántica tiene los rasgos siguientes:
-       Descripciones de la naturaleza, a veces en sus aspectos más negativos o peligrosos (tormentas, oscuridad, nubes, tumbas, barrancos…); otras veces en sus aspectos positivos ( paisajes bellos, ríos, prados, árboles…).
-       Descripción y vocabulario alusivo a elementos clásicos de le escultura y la arquitectura.
-       Léxico en torno a los sentimientos amorosos, sean positivos (belleza del rostro, ojos, frente, sonrisa, alegría, luz…), o de aspectos negativos (desengaño, dolor, tristeza, celos, lágrimas, noche…)
-       Abundancia de frases interrogativas y exclamativas.
-       Uso de la hipérbole; expresión hiperbólica de los sentimientos, tendencia a la exageración.
-       Empleo abundante de antítesis para enmarcar las oposiciones entre elementos: día y noche, belleza y fealdad, luz y oscuridad, orden y caos…




3.    LA POESÍA ROMÁNTICA

3.1.Temas de la poesía romántica

La poesía romántica se caracteriza por el intimismo con que muchos autores tiñen sus versos. En la lírica del Romanticismo están presentes temas como la angustia existencial por el anhelo irrealizable del ideal; el desengaño amoroso; la amada muerta en plena juventud; la poesía como único modo de dar sentido a la vida y la naturaleza virgen o indómita, con la que el poeta ansía fundirse. Se produce además una revitalización de la poesía narrativa, consecuencia del interés por el folclore, protagonizada por personajes rebeldes o marginales (Caín, don Juan…).

3.2. La lírica inglesa.
En la poesía romántica inglesa se distinguen dos grupos, cuyas intensas vidas, entrelazadas por la amistad, encarnan el espíritu romántico: los Poetas de los Lagos y los Poetas Satánicos.

a) Los Poetas de los Lagos: Reciben esta denominación un círculo de poetas (en particular Wordsworth y Coleridge) que, durante una época, vivieron en el llamado Lake District situado en el noroeste de Gran Bretaña, en cuyos paisajes buscaron la inspiración.

- Wordswoth: Es el poeta de la naturaleza. Considera la poesía “un desbordamiento” de sentimientos poderosos, recordados en la tranquilidad”. Así, en sus principales poemas ( La abadía de Tintern, Indicios de inmortalidad en los recuerdos de la primera infancia o el autobiográfico El preludio) , el yo lírico evoca instantes de fusión con la naturaleza experimentados en la infancia o juventud, y recobra, por medio de la imaginación y la memoria, esa perdida sensación de plenitud.

- Coleridge: En su producción poética destacan: Balada del viejo marinero y Kubbla Khan. Balada del viejo marinero es un extenso poema narrativo en el que un anciano marino cuenta sus desventuras (fue castigado con la muerte de toda la tripulación por matar a un albatros, que era su espíritu protector. Como dato anecdótico, el grupo Iron Maiden tiene una versión de esta composición poética ). Kubla Khan, escrito, según el autor, tras un sueño inducido por el opio, describe, en tono alucinatorio, el palacio y los jardines el emperador mogol Kubla Khan en Xanadú, bajo los cuales discurre un río subterráneo que emerge, súbitamente, en forma de fuente. La obra parece sugerir la oposición entre lo artificial y lo natural o entre lo consciente y lo inconsciente.


b) Los Poetas Satánicos. Pertenecen a este grupo Lord Byron, Keats y Shelley, en cuyas vidas y obras se manifiesta  la rebeldía frente a lo establecido, propia del espíritu romántico.

- Lord Byron: Autor de poemas narrativos ( El corsario, Don Juan, Manfred, Caín, Las peregrinaciones de Childe Harold), en sus versos configura el prototipo de héroe romántico: asocial y errante, envuelto, a veces, en el tedio y en el vacío existencial.

- John Keats: Entre sus poemas destacan Oda a un ruiseñor y Oda a una urna griega. En Oda a un ruiseñor, el yo poético escucha ensimismado el canto de un ruiseñor y consigue, con la alas de la poesía, alcanzar un instante de éxtasis, libre del tiempo y del sufrimiento humano, antes de volver a la realidad.  En la Oda a una urna griega, es el arte (el ánfora que contempla el emisor, decorad con una escena arcádica) el que ofrece un mundo de belleza ideal que, inmune al paso del tiempo, se opone a la vida humana. Trata sobre el poder inmortalizador de la belleza, manifestado en las elaboraciones artísticas que elaboraron los griegos.

- Percy B. Shelley: Además de la elegía “Adonais” , escrita tras la muerte de Keats (”Murió Adonais y por su muerte lloro”), cabe resaltar el poema “Mont Blanc” , de inspiración panteísta (donde hay identificación de Dios con la naturaleza o el mundo: “Si te miro, un soplo divino hasta mí viene”).


3.3. La lírica alemana. La poesía romántica alemana tiene un precedente en el Sturm and Drang“(tempestad e ímpetu), corriente literaria que nace en la segunda mitad del XVIII y que reaccionó contra la Ilustración otorgando mayor importancia a los sentimientos sobre la razón. En la poesía romántica alemana destacan:

- Shiller: Su Oda a la alegría es un canto a la fraternidad universal. Fue utilizada por el compositor Ludwing van Beethoven en su célebre Novena Sinfonía. También escribe Los dioses de Grecia, en la que muestra su desacuerdo con el mundo oponiendo dos esferas: por un lado, una visión idealizada de la antigua Grecia, donde se rendía culto a la belleza y el ser humano era capaz de percibir el carácter sagrado del cosmos; por otro, el presente , en el que la razón y la ciencia han provocado la huida de los dioses y la desacralización de la naturaleza (“ ningún ser divino a mi vista parece”).

- Hölderlin: En la obra lírica de Hölderlin destacan El archipiélago y Pan y vino. En ellas, como en Los dioses de Grecia de Shiller, la Grecia clásica (evocada a través del tópico de la Edad de Oro) se contrapone al tiempo presente, en el que el ser humano, radicalmente solo, ha perdido el sentimiento de comunidad con sus semejantes y se siente escindido o separado del Todo. Tras la marcha de los dioses (encarnación de las fuerzas naturales), el yo lírico se pregunta por el sentido de la poesía (”¿Para qué poetas en tiempos de miseria?”) y concluye que solo el poeta es capaz de experimentar la comunión con los otros, con el mundo, y de inducir, mediante su canto, estas experiencias en el receptor.

- Novalis: Seudónimo de Friedrich von Hardenberg, es autor  de uno de los ciclos de poemas más significativos del Romanticismo alemán: los Himnos a la noche, escritos tras la muerte de su prometida Sophie, con sólo diecisiete aos. En los seis poemas que forman la obra, Novalis establece una dicotomía entre la luz y la noche. La luz se asocia al mundo visible, material, en el que el yo poético se ve a sí mismo como un extranjero errante, incapaz de encontrar sentido a la existencia. La noche se vincula a la fe, la fantasía o la poesía. El sueño (la ensoñación) es la puerta de entrada a un ámbito invisible, espiritual, donde el yo se reencuentra con su amada.

- Heine: Sus poemas amorosos, incluidos en Libro de canciones, se caracterizan por su brevedad y contención Influirá a Bécquer.


3.4. La lírica italiana

- Giacomo Leopardi: El autor más representativo de la poesía romántica italiana es Giacomo Leopardi, autor de 41 Cantos, que son expresión depurada del pesimismo romántico; en ellos, el yo poético es un ser solitario y desengañado, que sufre por un amor nunca correspondido.


3.5. La lírica francesa

- Gerard de Nerval: En Francia, junto con Lamartine, Alfred de Vigny, Alfred de Musset o Théophile Gautier, destaca Gérard de Nerval., autor de una colección de doce sonetos titulados Las quimeras, una colección de doce sonetos, entre los que cabe destacar especialmente dos:
- “El desdichado”: En este poema sombrío y complejo, el yo poético se presenta desolado a causa de la muerte, del rechazo de la amada, de la derrota de las ilusiones…
- “Cristo en los Olivos”: Se trata de una serie de cinco sonetos en los que Cristo proclama que Dios no existe. En ellos aparece, por tanto, el tópico de la muerte de Dios, años antes de que fuera formulado por el filósofo alemán Friedrich Nietzsche.
4.    

LA NOVELA HISTÓRICA

La novela histórica pretende ofrecer una recreación  verosímil del pasado en la que coexisten personajes y sucesos inventados con otros de carácter histórico.
La aparición de este subgénero narrativo a principios del siglo XIX se relaciona con el desacuerdo con el mundo y el deseo de evasión  propios del Romanticismo. En este caso, como consecuencia del rechazo del mundo burgués alumbrado por la Revolución industrial, se busca refugio, en general, en una Edad Media idealizada, presentada como un tiempo de altos ideales y armonía social.

Las principales novelas históricas del Romanticismo son:

- Ivanhoe: Esta novela del escritor escocés Walter Scott, se ambienta en el siglo XII, durante los enfrentamientos entre los sajones y los invasores normandos. Ivanhoe, su protagonista, es hijo de un noble sajón que luchará, con la ayuda de Robin de Locksley (Robin Hood), por los derechos de Ricardo Corazón de León (rey de origen normando, partidario de una convivencia pacífico entre ambos pueblos), frente a los intentos de su hermano Juan Sin Tierra de hacerse con el trono. Walter Scott es considerado el iniciador de este subgénero.

- Notre Dame de París: Este relato de Víctor Hugo narra las desventuras de Quasimodo (un ser deforme y sordo que se encarga de las campanas de la catedral), enamorado de la gitana Esmeralda, en el París del siglo XVI.

- Los novios: La acción de la novela de Alessandro Manzoni transcurre en Milán durante el siglo XVII. Mediante la técnica del manuscrito encontrado, narra las vicisitudes de los jóvenes Rencio y Lucía, a quienes el perverso don Rodrigo, señor de la villa,  impide casarse. Incluso encarga a un criminal que secuestre a la joven, pero este se apiada de ella y la libera. Don Rodrigo muere por la peste, y Renzo y Lucía consiguen, al fin, reunirse. En la novela late un paralelismo  entre el dominio español sobre Milán en el de la acción y la dominación austríaca del Reino Lombardo-Véneto (donde existía un movimiento nacionalista) en la época en la que se escribió la novela.

La novela española tuvo un amplio desarrollo en España, con obras como El señor de Bembibre, de Enrique Gil y Carrasco; El doncel de don Enrique el Doliente, de Mariano José de Larra; o Sancho Saldaña, de José de Espronceda.
Este género influirá poderosamente en la evolución de la narrativa europea:
-       Por un lado, con Los tres mosqueteros, del francés Alexandre Dumas padre, la novela histórica da lugar a un nuevo género, la novela de aventuras, donde la acción trepidante cobra más importancia que la recreación de una época.
-       Por otro lado, la descripción minuciosa de usos y costumbres, que pretende aumentar la sensación de realidad, abre camino a la novela realista, que se desarrollará en las décadas siguientes.

Aparte de la novela histórica, en el Romanticismo se desarrollan otros subgéneros narrativos : la narrativa fantástica y de terror (Frankenstein o el moderno Prometeo, de Mary Shelley; El vampiro, de Polidor; El castillo de Otranto, de Horace Walpole; La leyenda de Sleepey Hollow, de Washinghton Irving; El gato negro, La caída de la casa Usher, La verdadera historia del señor Valdemar…de Edgar Allan Poe), la novela epistolar (Las penas del joven Werther, de Goethe), la novela de aprendizaje ( Las aventuras de Wilhelm Meister, de Goethe; Enrique de Ofterdingen, de Novalis) y la novela sentimental (como las obras de la inglesa Jane Austen: Sentido y sensibilidad y Orgullo y prejuicio).


No hay comentarios:

Publicar un comentario